La autocrítica, los sentimientos de culpa y la mala conciencia son compañeros constantes de este tipo de carácter.
La personalidad en cuestión se reproche constantemente por algo. Acompañado por la sensación de haber hecho mal, siente la necesidad de explicarse constantemente.
A pesar de que otros piensan que todo está bien, este tipo de personaje encuentra mala conducta en sus acciones.